La vaginosis bacteriana es una condición en la que el medio ambiente natural de la vagina se altera como resultado de crecimiento excesivo de bacterias nocivas que habitan en el área vaginal.
Las bacterias dañinas se multiplican rápidamente debido a varias razones, en particular la falta de higiene y hábitos alimenticios poco saludables.
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Cuando estas bacterias dañinas se multiplican y superan a las bacterias buenas o beneficiosas que también habitan en la vagina, entonces este desequilibrio provoca la infección vaginal.
Algunos de los síntomas de esta enfermedad incluyen flujo vaginal blanco grisáceo que es más evidente después de tener relaciones sexuales, olor vaginal como a pescado, picazón vaginal y micción difícil o dolorosa.
La principal causa de esta infección es aún desconocida, pero ciertos factores pueden aumentar el riesgo de esta condición, y estos incluyen; ducha vaginal excesiva, tener múltiples parejas sexuales, relaciones sexuales sin protección, el uso de dispositivos inter-uterinos para el control de natalidad, así como el uso de aerosoles vaginales.
Los antibióticos generalmente se prescriben para el tratamiento de la vaginosis bacteriana. Los tratamientos convencionales que utilizan antibióticos sólo pueden proporcionar un alivio temporal ya que siempre hay la posibilidad de que la enfermedad pueda volver a ocurrir.
Esto puede hacer que tomes más dosis de antibióticos que son perjudiciales para el organismo, ya que es probable que cause efectos secundarios.
Si se te ha diagnosticado vaginosis bacteriana o tienes alguno de los síntomas, el paso más importante hacia el tratamiento es modificar tu dieta. Hay ciertos alimentos que pueden ayudar a controlar los síntomas de la vaginosis bacteriana.
Los siguientes son algunos de los alimentos a comer y evitar en la prevención y el control de tu infección por vaginosis bacteriana:
Alimentos a comer
Debes comer una dieta con alto contenido de fibra. Las frutas frescas, verduras y granos integrales tienen un alto contenido de fibra, por lo que hay que comerlas regularmente. También debes incluir suplementos nutricionales, como la vitamina C en tu dieta regular con el fin de estimular tu sistema inmunológico.
Bebe mucha agua todos los días. Bebe por lo menos 8 a 10 vasos de agua todos los días. Esto es necesario para que puedas estar hidratada en todo momento. Beber mucha agua ahuyentará todos los líquidos innecesarios del cuerpo y también ayudará en la digestión de azúcar adicional en el sistema.
Esto eliminará una fuente importante de alimento para las bacterias malas en la vagina. Además, trata de beber mucho jugo de arándano. Contiene alto nivel de ácido que suprime el crecimiento de bacterias nocivas en la vagina.
Alimentos a evitar
Comer algunos alimentos puede aumentar el riesgo de contraer la enfermedad o agravar los síntomas de una infección vaginal existente. Deja de comer alimentos con alto contenido de glucosa o azúcar, como el pan blanco. Este tipo de alimento es una fuente de nutrientes para las bacterias malas en la vagina. Por lo tanto, debes evitarlos en tu dieta. En su lugar, opta por pan integral, que contiene menos contenido de glucosa y azúcar.
Evita la sal o reduce la ingesta excesiva de sal en tu dieta. El exceso de sal en el cuerpo puede causar retención de agua y también puede aumentar el riesgo de infección del tracto urinario.
Para deshacerte del flujo y el mal olor vaginal, los alimentos antes mencionados son muy importantes. Pero pueden ser incorporados con grandes planes dietéticos para darte el resultado deseado en un tiempo muy corto para eliminar la vaginosis bacteriana de una vez por todas.
